Capítulo 741

Incluso los bebés que esperaban también tuvieron que abandonarlo. No. Ella no pudo contenerse. Una vez más, las lágrimas llenaron sus ojos. Sintió como si alguien le estuviera tirando de una cuerda por la nariz, provocando que las lágrimas cayeran por las esquinas de sus ojos. Ella no se atrevía a dejar que Julian la viera llorar, así que se tapó la boca y la nariz con las manos. "¡Uf!". Fingió sentir náuseas y corrió al baño. Se abrazó a la taza del inodoro y empezó a tener arcadas. Aprovechó la oportunidad y dejó que sus lágrimas cayeran libremente. Julian estaba a su lado. Confundido, le preguntó, "¿Por qué tienes arcadas ahora? Esto parece incluso peor que cuando vomitas de verdad". Diana agarró unas servilletas y se calmó. "Sí, prefiero vomitarlo todo". A Julian le dolía el corazón ver sufrir tanto a Diana. "¿Por qué no hay medicinas para las náuseas matutinas?". Era como si las mujeres tuvieran que sacrificarlo todo en el momento en que se quedaban embarazadas. Tenían