Capítulo 65

Una vez en el baño, Sean hizo una llamada. Tenía que sacar a Frank o, ¡no lograría a tener a Helen esta noche! "¿Hola? ¿Quién es?". "Zuco, soy yo, Sean". El tono del hombre se tornó amistoso al instante, "¡Oh, Señor Wesley! ¿A qué debo el placer?". Sean rápidamente le dio los detalles, y Zuco no tardó en acariciarse el pecho y asegurarle: "No te preocupes, hermano. Esto déjamelo a mí". "Sí. Esos serían cien mil dólares a tu cuenta más tarde". Sean sonrió. "No me hagas venir hasta aquí para nada". Con eso, colgó y alegremente regresó a su asiento. Gina preguntó ansiosa: "¿Dónde estaba Señor Wesley?". "En ninguna parte. Solo fui al baño", Sean dijo, estudiando alegremente a Frank por un momento antes de girarse hacia Helen, ignorándolo. "Helen, creo que ese bastardo obviamente está aquí para hacerle enojar. No nos dejemos de ellos. Vamos a disfrutar e ignorarlos". Gina repetidamente asintió con la cabeza. "El Señor Wesley tiene razón. No te rebajes con ellos". Helen t