Capítulo 58

Lucille se detuvo. En el video, se veía a Molly acostada en el montículo, llorando a lágrima viva y preguntando si Bobo ya no la quería. Sus nerviosos sollozos restaban claridad a lo que decía. No obstante, los presentes en el banquete de Joseph la oyeron, y este la entendió perfectamente. Lucille mantuvo la calma y explicó: "Es un gato que yo criaba". "Ah. ¿Entonces, de eso se trata?". Joseph mostró una vaga sonrisa divertida. Había un atisbo de curiosidad en sus ojos oscuros y hermosos. La miró mientras su cuerpo emanaba un aura canallesca. Debido a su postura distraída y relajada, no era fácil formarse una idea sobre hasta qué punto él le creía. Lucille lo miró con serenidad, sin ningún rastro de cargo de conciencia. El rio bajo y no insistió en el tema. El coche paró poco después. Lucille miró hacia afuera y percibió que se había estacionado frente a la Jules Residence. Joseph dijo: "Todavía es temprano. El helicóptero llegará temprano en la mañana y todavía quedan unas horas, así