Capítulo 25
—¿Y para bañarme también? —Preguntó él con tono provocador.
María apretó los labios, dudó un instante y, al final, murmuró en voz baja: —También puedes llamarme, al fin y al cabo, no sería la primera vez que nos vemos sin nada que ocultar.
No muy lejos, Jairo escuchó claramente aquellas palabras. Un dolor punzante brotó de su pecho, extendiéndose con violencia por todo el cuerpo.
Se mordió con fuerza la lengua, y en un segundo el sabor a sangre inundó su boca. Solo ese dolor lo mantenía un poco consciente.
¿Ellos ya habrían hecho todo?
Seguramente sí.
—María, ¿por qué en apenas unos meses pudiste enamorarte tan fácilmente de Pablo? Si hasta yo, ni siquiera con Lorena llegué a ese punto.
—Si lo que querías era castigarme, ¿no había otras formas? ¿Por qué justo así?
Su voz salió ronca, cargada de una tristeza infinita.
Pero María ya se había subido al auto junto a Pablo, alejándose sin mirar atrás.
Observando la dirección por la que se marchaban, Jairo sintió que el corazón se le desgarr

Naka-lock na chapters
I-download ang Webfic app upang ma-unlock ang mas naka-e-excite na content
I-on ang camera ng cellphone upang direktang mag-scan, o kopyahin ang link at buksan ito sa iyong mobile browser
I-click upang ma-copy ang link