Capítulo 42

Beatriz es mi madre, la única familia que tengo en este mundo. Si ella ha cometido algún error, yo estaría dispuesta a asumir la mitad de su culpa. Por eso, todos estos años he vivido con una mezcla constante de inseguridad y autodesprecio. Esta vez, el silencio se prolongó mucho más que otras veces. Cuando el avión estaba a punto de aterrizar, Pablo volvió a hablar: —¿Qué piensas hacer cuando te gradúes? Al tocar ese tema, recuperé el entusiasmo; al fin y al cabo, una joven que está por entrar en el mundo laboral siempre tiene expectativas sobre él. —Planeo enviar mi currículum a una gran empresa y también asistir a las ferias de empleo que organicen. Cuando llegue el momento, elegiré una que se ajuste a mí y me presentaré a la entrevista. —¿Entre esas empresas está el Grupo Cisneros? Negué con la cabeza: —No. Tuve que esforzarme bastante para filtrar y encontrar empresas que no tuvieran relación con el Grupo Cisneros. Pablo frunció el ceño de inmediato: —Eres demasiado ingenua. Su en