Capítulo 350

Robin dijo que volvería antes de las ocho de la noche, pero a las ocho y media de la noche ya no se le veía por ningún lado. Cuando ella lo llamó, su teléfono estaba apagado. En el sofá de la sala, Zebedeo jugaba al ajedrez con Lance. Al ver que Amelia había regresado de la llamada telefónica, preguntó: "¿Robin todavía no contesta el teléfono?". Amelia vaciló por un momento y dijo: "Sí. Dijo que tenía algo que hacer en la empresa y que podría volver más tarde. Comamos primero". Zebedeo no dudó de ella. Recogió el tablero de ajedrez y se dirigió al comedor. Lance miró a Amelia y guardó silencio. Después de cenar, Amelia envió a Zebedeo arriba a descansar. Cuando regresó a la cocina, vio que Lance ya había lavado el cuenco. "Señor Wall, déjeme hacerlo". "Estoy bien. He empacado". Lance sacó un pañuelo de papel y se secó el agua de las palmas y los dedos. Bajó la cabeza y se concentró en limpiar las manchas de agua de sus manos. Sin levantar la vista, preguntó en voz baja: "¿Robin está sa