Capítulo 1115

Después de escuchar a Alicia, Roberto esbozó una leve sonrisa. Alicia se mostró un poco inquieta. —¿Qué te parece? —Nosotros también acabamos de debatir varias opciones para afrontarlo, y entre ellas está la que mencionaste. Cuando llegue el momento, veremos si elegimos la más segura o si hacemos lo que tú sugieres. Alicia tosió suavemente. —También es cierto, ustedes tienen un equipo profesional, seguro que saben qué hacer. Roberto le tomó la mano. —No tienes por qué sentirte incómoda; al fin y al cabo, no has pasado por esto antes. El simple hecho de que se te ocurran estas ideas ya es algo muy bueno. Al escuchar sus palabras de consuelo, Alicia se sintió mucho más apenada. Después de todo, ella había vivido dos vidas. Pero, lamentablemente, en la anterior siempre trabajó para el beneficio de otros y nunca tuvo experiencia en gestión empresarial ni en batallas comerciales. En esos asuntos, en realidad, ella no sabía nada. Alicia miró la hora. —Entonces, te acompaño. Vas a quedarte a