Capítulo 1471

Roberto tenía la cuerda en la mano y acarició la cabeza de Alicia. Se inclinó y le susurró al oído: —Si por la noche también fueras así de obediente, sería perfecto. Alicia alzó la vista y lo fulminó con la mirada; "este Roberto, de verdad..." Roberto soltó una leve risa y, tras atarla bien, le pellizcó la mejilla. —Vamos, llegó el momento de poner a prueba tu actuación. En ese instante, las embarcaciones de ambos bandos se aproximaron. Roberto no se mostró, pero alcanzó a ver a los miembros de la familia García en la cubierta, aguardando con ansiedad. Oscar, de pie en la cubierta, observó a los del barco contrario. —Que salga a verme, ¿no quería hablar conmigo? Uno de los hombres en la cubierta respondió: —¿Hablar de qué? Basta con que entregues la isla y hoy mismo te devolvemos a Alicia. En ese momento, sacaron a Alicia, con manos y pies atados. Al verla, Oscar apoyó ambas manos en la barandilla. —Suéltenla. —Podemos soltarla, claro, pero ¿ya dejaste todo preparado con la isla? —Todo