Capítulo 566

Alicia cruzaba la calle abstraída, cuando de repente el semáforo cambió de color, pero ella no lo notó. Los vehículos al lado comenzaron a dirigirse hacia la acera. —Capitana, tenga cuidado. De repente, alguien jaló de Alicia, lo que la hizo reaccionar y ver los carros que pasaban rápidamente junto a ella, lo que la hizo sudar frío. Alicia levantó la vista y vio al joven frente a ella, lo reconoció como un miembro del equipo Rayo de Fuego: —Gracias. —Capitana, ¿qué le pasa? Parece que no se siente bien, ¿necesita que la lleve al hospital? —No es necesario, estoy bien. Alicia esbozó una sonrisa forzada, su estado de ánimo era un caos. El joven la acompañó a cruzar la calle: —Capitana, ¿tiene algún problema? Dígame, tal vez pueda ayudarla. Alicia bajó la mirada, y luego dijo: —No tengo clases esta mañana, ¿vas a entrenar en la base? —Claro que sí. Alicia también fue directamente a Rayo de Fuego, donde había pocas personas entrenando esa mañana. Ella, sintiéndose agitada, encendió la comp