Capítulo 43

Alonso mandó traer una tableta, en la que estaban el diseño y la planificación completa de la boda. Regina bajó emocionada la cabeza y observó con suma atención el contenido en la pantalla. En realidad, quería decir que todo lo decidiera la familia Ruiz. Pero como Alonso ya se lo había mostrado, debía mirarlo con total seriedad. Alonso estaba sentado junto a Regina, y bajó la mirada hacia la hendidura en el sofá, esa que se formaba porque ambos compartían asiento. Regina examinaba con detalle, y un mechón de su cabello se deslizó con suavidad junto a su oído. De manera natural, Alonso levantó la mano y acomodó aquel mechón detrás de su oreja. —¿Ya lo viste todo? ¿Tienes alguna opinión al respecto? Podemos pedírselo al diseñador para que lo cambie. Regina dejó la tableta a un lado y lo negó. —No tengo ninguna opinión al respecto, todo está muy bien. Después de sus palabras, el ambiente volvió quedar en silencio. Regina levantó la mirada hacia el cielo del patio; las nubes parecían muy b