Capítulo 128

Capítulo ciento veintiocho – Lo que busca. El punto de vista de Ferdinand Deja lo mejor para el final, dicen. Los últimos tres pícaros estaban muy ocupados, ya fuera por romper el rango Delta o por ser guerreros muy habilidosos. Le agarré una pierna y le arrastré las garras hasta el tobillo. Cayó al suelo y luego se alejó de mí. Los otros dos me tacklearon, me dieron cabezazos y puñetazos en el estómago, pero lo esquivé todo. Le di una patada al otro y cayó sobre su compañero. Estaba perdiendo fuerza, pero me preparé para otra pelea. Se estaban levantando. —Deberías irte. ¡Siento una energía fuerte, Logan! —me advirtió mi lobo. Miré mis manos preguntándome qué hacer cuando me di cuenta de que no había usado las granadas. El gas venenoso fue un fracaso total, casi me mata. Tomé dos granadas y corrí hacia la puerta. Mientras los dos pícaros me perseguían, se lo tiré y vi cómo explotaban. Horrible. Se escucharon algunos gruñidos desde el interior de la cueva, mientras la energía de Logan