Capítulo 78

Alonso vio la desconfianza en sus ojos y sonrió suavemente. —Tranquila, aunque estoy muy interesado en encontrar talento, soy un buen ciudadano que sigue la ley. De hecho, un amigo me dijo que te vio en el vecindario. La desconfianza en los ojos de Norma desapareció. —Norma, si tienes prisa, tengo varias propiedades en esa zona que podrías ver. Norma, al escucharlo, sintió el impulso de rechazar la oferta. Alonso, con una voz suave, dijo: —Aunque no seamos socios de trabajo, al menos somos amigos. —No te preocupes, no te voy a dejar vivir gratis. Soy capitalista, pero te alquilaría una de mis casas vacías, como si tú me estuvieras mostrando propiedades. Norma comenzó a sentirse un poco más relajada. Pensó en que Alonso le había ayudado en varias ocasiones, y también en cómo Amelia le debía un favor a Alonso. Ya que estaba en deuda, no le importaba sumarle uno más. —Señor Alonso, quiero alquilar una casa, ya que está cerca del hospital donde está mi madre. Cuando ella sea dada de alta y