Ana Pérez era una piloto de carreras famosa por su extraordinaria belleza.
Incontables personas se rendían a sus pies bajo su mono de competición; los que la perseguían podían dar tres vueltas alrededor del planeta.
Sin embargo, ella no se dejaba conmover por nadie.
José Gómez era un piloto con talento natural y el enemigo mortal de Ana.
De cara al público, cada vez que se encontraban chocaban como cuchillos, deseando destruir al otro.
A espaldas de todos, en cambio, se enredaban hasta el agotamiento en cada rincón.
Ana creía que José, igual que ella, tenía un entendimiento tácito sobre la relación que había entre ambos.
Hasta que lo vio con sus propios ojos aparecer en el circuito de carreras de la mano de otra muchacha.