Capítulo 112

El punto de vista de Lydia Hace un mes que me liberaron de aquella caravana en la que Donian me tenía cautiva. Un grupo de guerreros de Eclipse Moon irrumpió y antes de que Donian pudiera sacar su arma, ya estaba esposado. Pasó casi una semana en la espantosa mazmorra de la manada antes de ser recogido por la policía del cercano pueblo humano. Por supuesto, he presentado formalmente una denuncia contra Donian, acusándolo de secuestrarme y chantajearme y tendrá que pasar mucho tiempo en la cárcel por ello. ¡Y Julián, ese fue un encuentro emotivo, decírtelo! Cuando el jefe guerrero me sacó de la cabaña, de la nada cargó contra mí y me abrazó como un oso. Respirar era un problema, el hombre me abrazó con tanta fuerza contra su pecho que mis costillas casi se aplastaron. Su cálido cuerpo era realmente lo que necesitaba entonces, esa sensación tranquilizadora de que estaba a salvo. ¡Y Juan! Como un animal herido, corrió hacia la caravana, la registró agresivamente por todos lados, clarament