Capítulo 21 ¿Cómo poder obtenerla?

Bruno bajaba la cabeza, Bruno y Julia estaban muy cerca. Y esos ojos hermosos, que antes reflejaban una muerte silenciosa, en ese momento parecían mostrar una leve agitación, como si escondieran... Un deseo. ¿Un deseo? Julia casi se echó a reír ante aquella palabra que cruzó fugazmente por su mente. ¿Qué estaba pensando? De ninguna manera Bruno podría desear a una simple guardaespaldas. —En este mundo hay muchas personas que nunca abandonarían al señor Bruno, no hace falta que yo sea una más. ¡Ding dong! El ascensor llegó al primer piso, las puertas se abrieron y Julia salió rápidamente. —Señor Bruno, lo mejor es que vaya al hospital a hacerse un chequeo, es más seguro. Yo me retiro ya —dijo Julia, y girándose, se marchó. Un hombre como Bruno desprendía una sensación de peligro, y la intuición le decía a Julia que lo mejor era mantenerse lejos de alguien así. Bruno observó en silencio la figura de Julia alejándose, y de pronto, con voz lenta, le habló a su secretario Daniel, que estaba