La habitación quedó en silencio por un instante.
Armando soltó una carcajada. —¿De qué estás hablando? La noticia de que el Consorcio Atlas colabora con el Hospital del Alba es casi de dominio público. ¿Cómo podrían asociarse con ustedes...?
No alcanzó a terminar la frase cuando el médico le mostró la pantalla del celular frente a los ojos. Armando vio la noticia y se quedó petrificado.
[El Consorcio Atlas y el Hospital del Silencio establecen una cooperación amistosa; continuarán proporcionando el equipamiento internacional más avanzado...]
—¿Qué...? ¿Cómo es posible? —La cara de Armando se tornó perpleja.
Dolores también estaba sorprendida.
¿El Consorcio Atlas no había decidido ya colaborar con el Hospital del Alba? ¿Cómo podía haber cambiado de decisión y elegir al Hospital del Silencio?
Andrea se quedó unos segundos callada, pero pronto mostró una sonrisa llena de aprobación. —Susana, ¿lo sabías desde antes? ¿Por eso me trajiste aquí?
—Sí. Sentía que el Hospital del Silencio tenía