Capítulo 163
—Según tú, mis habilidades no tienen valor alguno y mi salario es insignificante.
Lucía ya estaba acostumbrada a sus comentarios sarcásticos y fuera de tono. En este momento, su único objetivo era el dinero.
Apretó los dientes con fuerza y continuó: —Así que la asignación mensual debe seguir dándomela.
Wálter mantuvo su expresión fría y distante. No siguió en ese momento con sus burlas, pero tampoco accedió de inmediato.
—Mañana por la tarde, acompáñame a un lugar. Te haré la transferencia allí.
Era un trato. Si no iba, no recibiría el dinero.
Lucía lo miró con sorpresa: —¿De verdad no puede ser, quieres llevarme contigo?
Se refería a un sitio que no fuera su casa o la Casa de los Fernández.
¿No le preocupaba que salieran rumores si la llevaba con él?
—¿Qué es lo que pasa? —Wálter la observó con detenimiento: —¿No acaso quieres ir?
—Por supuesto que sí. —Lucía se entusiasmó, pero no pudo evitar añadir: —Solo que, si surge algún escándalo y eso molesta a la vicepresid

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