“¿Oh?”.
Sotiria sonrió.
“¿Y por qué no? Tengo todo el poder en mis manos ahora. No puedes decir nada sobre lo que puedo o no puedo hacer”.
Ella movió los pies una vez más mientras decía esto y siguió caminando.
“Jejeje… ¿Qué sabes tú, Sotiria Green? Estoy empezando a sospechar que nunca perdiste tus recuerdos, que solo estás usando ese incidente para fingir como si hubieras olvidado por completo tu escandaloso pasado para poder pasar página”.
El rostro astuto de Melina se veía aún más encantador y simpático que nunca después de haber pasado por tal abuso.
Sotiria se detuvo en sus pasos. “¿Por qué dirías eso?”.
“Porque creo que nunca te rendiste con Mario. Tu objetivo principal al hacer esto no es solo vengarte de mí. Solo estás tratando de hacer que Mario y yo rompamos. ¡Entonces tú y él pueden tener una aventura aún más inescrupulosa!”.
Sotiria sintió como si hubiera caído en una cueva de hielo. Estaba fría por todas partes.
“Sotiria, ¿de verdad crees que no sabía de tu relac