Capítulo 112
Media hora después, Isobel terminó de limpiarlo y luego se acostó junto a Raphael.
Había estado nerviosa durante los últimos días preocupándose por él, ahora finalmente se sentía en paz.
Intentó mantener los ojos abiertos para poder vigilarlo, pero el cansancio la venció y pronto se quedó dormida.
Rafael miró a la mujer dormida a su lado y no pudo evitar sonreír.
Acarició suavemente el cabello oscuro de Isobel y luego le plantó un beso en la frente.
"Buenas noches, mi amor."
**********
Al día siguiente, muy temprano en la mañana, el sol salió lentamente y la brisa era agradable.
Andrea estaba aturdida cuando Sebastián la levantó suavemente de debajo de las sábanas.
El hombre la cargó como a una niña directamente hacia el baño.
"Bebé, tenemos que refrescarnos ahora. Recuerda, verás a la señora Rojas más tarde".
Andrea puso su mano sobre su hombro, lo miró con ojos adormilados y preguntó en voz baja:
"Esposo, ¿qué hora es?"
Sebastián escuchó la delicada y suave voz de la mujer y le calen

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