Capítulo 298
Él sonrió con amargura, con el rostro lleno desanimado: —Tranquila, me iré. Esta vez no te estoy mintiendo.
Rocío dijo con frialdad: —De acuerdo.
No volvió a mirar a Tomás, se dio la vuelta y caminó hacia el interior de la casa.
Tomás miraba su espalda. Aunque solo los separaban unos cuantos pasos, sentía que Rocío estaba cada vez más lejos de él.
Como la arena entre los dedos, que por más que uno se esfuerce en retener, acaba por escurrirse sin dejar rastro alguno.
...
Laura se encontraba en la cama, dando vueltas toda la noche sin poder conciliar el sueño.
Anoche, su intención era esperar a que Luis saliera del cuarto de doña Isabel para poder consolarlo un poco. Quería que sintiera su ternura y comprensión, para que así su corazón no se inclinara hacia otra mujer.
Pero justo cuando subía las escaleras, escuchó una discusión proveniente del interior del cuarto.
A esa hora, todos los sirvientes de la casa ya descansaban y nadie la vio, así que Laura, armándose de valor, se acercó sigi

Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil