Capítulo 300
Laura estaba tan furiosa que los ojos se le enrojecieron, pero bajo la mirada de Luis, tuvo que obligarse a esbozar una linda sonrisa.
—¿Cómo podría olvidar lo que me pediste? Quédate tranquilo, cuando Ana regrese, no importa cómo me trate, no te preocupes yo lo aguantaré todo. Jamás volveré a causarte molestias.
—Así me gusta, que seas una chica comprensiva.—Luis, de buen humor, le dio unas palmaditas en la cara y sacó una tarjeta de su billetera para entregársela.— Pero ya que prometí cuidar de ustedes dos, en ningún momento voy a fallarles. Sé que esto te costará algún pequeño sacrificio, así que toma esta tarjeta. Compra lo que te guste, y si no alcanza, solo dímelo.
Laura miró la tarjeta con una codicia que se agitaba en lo más profundo de sus ojos. Movió los dedos, deseando poder arrebatarla enseguida.
Pero al cruzarse con la mirada de Luis, su movimiento se congeló. Reprimió el dolor en su interior y empujó la tarjeta de regreso.
—No hace falta, Luis. —Laura frunció los dientes,

Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil