Capítulo 59

Narradora: Suzie Blandí mi espada, chocándola contra otra. Los hombros y los antebrazos me gritaban de la tensión que ejercía yo, intentando no perder la postura. Mi rival era un hombre duro de roer, pero su oponente, una servidora, no estaba por la labor de rendirse. Firme, planté el talón en el suelo y empuje con la suficiente fuerza como para forzar al otro a dar un traspiés hacia atrás. Cayó literalmente de culo, y tras ello, relajé mis brazos y aparté la mirada hacia los soldados, presenciando los aplausos y vítores de los demás soldados que hacían de público a nuestro duelo en el campo de entrenamiento. La verdad es que me avergoncé ligeramente, ruborizada para mi propia sorpresa. "La leche, Suz... Parece que cada día te vuelves más fuerte.", gimió el hombre. "Comandante primero, ¿soy yo, u hoy está terriblemente débil?", le tendí la mano, exultante. Exhalando un bufido de resignación, se sirvió de mi antebrazo para incorporarse. "Ya te he dicho que me llames Edward." "Pero estoy