Capítulo 154
Baldomero quedó petrificado.
David, recordando algo más, preguntó con aparente preocupación: —¿Jefe Baldomero, necesita usted un maestro para ahuyentar fantasmas? Me preocupa que el papá de Margarita venga esta noche a estrangularlo.
...
A Baldomero casi se le fue la sangre al cerebro y por poco escupe una bocanada.
Viviana repasó mentalmente todos los recuerdos tristes del pasado, pero aún así no pudo contener la risa.
Su jefe, cuando se ponía implacable, hasta se insultaba a sí mismo. Y encima de todo se preocupa por la seguridad de los mayores. ¡Qué buena persona era!
No solo ella fracasó en contener la risa; los que estaban en el sofá parecían estar también a punto de estallar por dentro.
Margarita tenía la cabeza tan baja que ni siquiera se atrevía a levantarla.
En ese instante, Baldomero por fin entendió todo.
Este muchacho simplemente se estaba burlando de ellos.
Con razón Celestino decía una y otra vez que era más astuto que un zorro y más venenoso que una cobra. Dominarlo era

Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil