Capítulo 71 Yo hago lo que tú digas
—¡Ah!
Evaristo gritó, cayendo pesadamente al suelo, incapaz de levantarse debido al agudo dolor.
—¡Evaristo!
Almira gritó, corriendo a socorrerlo, mientras los demás no se atrevían a moverse.
En ese preciso momento, quien se atreviera a actuar lo estaría haciendo en contra de Fabián, y nadie quería asumir las consecuencias de ello.
En la penumbra, Fabián observaba de reojo a Evaristo con una expresión fría e implacable, rodeado por una atmósfera sombría y aterradora.
Era la segunda vez que veía a Fabián tan furioso, y, sorprendentemente, lo estaba por mí.
En señal de agradecimiento, tomé su brazo y susurré suavemente:
—Está bien, Fabián, no hace falta pelear con este tipo. Ya lo has castigado bastante, ¿por qué no nos vamos?
Tan pronto como terminé de hablar, la fría atmósfera que rodeaba a Fabián se disipó de inmediato.
Cuando me miró, su mirada ya había recuperado su calma.
—Hago lo que tú digas.
Justo cuando me di vuelta junto a Fabián, escuchamos desesperado a Eva

Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil