Capítulo 42

Clara contestó el teléfono desde su propio balcón. —¿Hola, Raúl? Del otro lado, él guardó silencio por un buen rato, como si no pudiera creer que la voz en el teléfono fuera la de Clara. Pasó un tiempo antes de que finalmente hablara: —Clara, ¿estás... bien? Resulta que, hace poco, Raúl no podía comunicarse con ella desde el extranjero, y luego se enteró de que había tenido un accidente cayendo al río, aunque nadie sabía si estaba viva o muerta. Raúl había compartido varias aventuras con ella, conocía sus habilidades de supervivencia y siempre estuvo convencido de que aún estaba viva. Incluso tomó un avión privado de su familia para regresar al país y averiguar lo sucedido, hasta que en este momento escuchó su voz y por fin pudo calmarse. Clara sonrió y dijo: —Tranquilo, estoy bien, solo fue un malentendido. —Menos mal —dijo Raúl tras unos segundos de pausa—. Ya estoy de regreso en el país. ¿Vamos a comer algo? Quiero hablar contigo cara a cara y entender qué pasó realmente. Clara dudó