Capítulo 836

"Es cierto. Yael es solo una mujer". “...”. En la habitación. El Amo Ziegler acababa de entrar. Yael cerró la puerta detrás de ellos y arrancó la chaqueta antes de abrazarle la cintura a él por detrás. “¡Chance, quiero morir! Ya no puedo seguir viviendo en esta vida". El Amo Ziegler se dio la vuelta. Cuando vio la apariencia desnuda de Yael, una pizca de severidad brilló en sus ojos oscuros. "No seas ridícula". Chance Ziegler dijo fríamente: “Te advertí hace mucho tiempo que Sarah Neeson es solo alguien a quien proteges. ¿Por qué interfiriste en el asunto personal entre ella y Catherine Jones? Todo lo que tenías que hacer era realizar la tarea que el Primer Joven Amo dispuso para ti". "Pero realmente me acusaron falsamente". Yael sollozó. “Solo estaba siguiendo las órdenes del Primer Joven Amo de registrar su cuerpo, pero Catherine secretamente me guardó rencor. ¿Por qué tuvo que desquitarse conmigo porque le guardaba rencor a la Señorita Neeson? El Primer Joven Amo también. Cuando él estaba en buenos términos con la Señorita Neeson, podía arrancar la luna del cielo, pero cuando está con Catherine, todas sus órdenes se volvieron culpa nuestra. Es demasiado difícil ser el subordinado de alguien más". "Yael, cállate". Chance advirtió en voz baja. “Solo estoy triste y no puedo contenerme. Chance, no entiendes la sensación de estar desnuda frente a tantos hombres". Yael se puso a llorar. “No puedo olvidar sus miradas. Ellos... Ellos siguieron mirándome de manera tan repugnante. Me siento tan sucia. Quiero morir". Después de eso, ella se volteó y se arrojó a la puerta. “Yael, no seas ridícula. No eres sucia". Chance inmediatamente la agarró y la atrajó hacia sus brazos con fuerza. “Chance, no me detengas. ¿Qué debería hacer? No te merezco". Yael lloró cuando ella cayó sobre su pecho. “No seas tonta. Eres la niña pequeña que crecí viendo". Chance le acarició el cabello gentilmente. “Chance, abrázame. De lo contrario, me sentiré muy mal". Yael de repente bajó la cabeza y tiró de la ropa en el pecho de él descuidadamente. Luego, ella lo besó. Chance era un hombre de mediana edad. Frente a su cuerpo joven y apasionado, él pronto fue incapaz de resistirse. Cuando terminó, Yael se inclinó contra su pecho y murmuró con los ojos cerrados: “Chance, a veces me siento tan cansada. Siempre tengo que escuchar al Primer Joven Amo. Vivo como... como un perro". “No digas tonterías. Estamos endeudados con el Primer Joven Amo. Si no fuera porque la familia Hill nos acogió, no estaríamos aquí hoy". Chance le agarró los hombros. "No deberías ir al lado de Sarah Neeson por el momento". Yael entró en pánico. "Pero la Señorita Neeson realmente necesita...". "Yael, tienes que recordar que Sarah es solo alguien a quien estás protegiendo". Chance le recordó. “Si sigues con esto, fácilmente serás expulsada de Liona. Sabes lo doloroso que será el precio de dejar a Liona". Un escalofrío se apoderó de Yael. Si dejaba a Liona, tendrían que cortarle los músculos y tendones, perdería sus artes marciales y su dinero también sería confiscado. Para personas como ellos que practicaban artes marciales toda su vida, perder sus artes marciales sería equivalente a quedar lisiado. Ella apretó los dientes en secreto mientras el odio se desbordaba de sus ojos. Ella definitivamente se vengaría por esto. … Por la noche, poco después de que Yael se fue, Chance recibió una llamada de Shaun de nuevo. Shaun dijo directamente: “Te daré dos opciones. Uno, transfiere a Yael fuera del país. Dos, expulsa a Yael de Liona". El rostro de Chance cambió por el horror. “Primer Joven Amo, Yael solo cometió un pequeño error. Ya la he criticado. ¿No es demasiado serio para usted hacer eso?".