Capítulo 18
Ella se quedó atónita por un instante y agachó la cabeza para continuar con el boceto preliminar que tenía entre manos; había demasiadas cosas por hacer y no podía perder tiempo dándole vueltas a otros asuntos.
No había pasado mucho desde que volvió a concentrarse en el trabajo cuando el celular comenzó a vibrar de nuevo.
En medio de su ajetreo, Silvia echó un vistazo fugaz a la pantalla y, frunciendo las cejas, decidió no responder.
Sin embargo, la otra parte siguió insistiendo, llamando una y otra vez.
Con el carácter de Armando, como mucho llamaría dos veces y lo dejaría estar.
A menos que fuera por algo importante…
Con las cejas aún más fruncidas, Silvia contestó con evidente fastidio.
Si Armando la estaba llamando, más le valía que fuera por algo realmente necesario.
—¿Qué pasa?
—¡Gustavo tiene fiebre!
Nada más establecerse la llamada, ambos hablaron al mismo tiempo y luego guardaron silencio unos segundos.
El entrecejo de Armando se tensó. ¿Es que ahora Silvia solo le respondía c

Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil