Capítulo 294

Ximena se apartó para tomar un vaso de agua con gas y se dio cuenta de que cada bebida tenía marcado su sabor, y la mayoría de ellas eran sin alcohol, por lo que no tenía que esforzarse por evitar las bebidas alcohólicas. En ese aspecto, estaba bastante satisfecha. Cuando regresó, escuchó a Beatriz quejarse en voz baja: —¿Por qué solo hay bebidas para niños? ¿No han preparado alcohol hoy? Al escuchar esto, el jefe Ángel se giró para explicar: —Ustedes no lo saben, señorita Carmen ha estado algo mal de salud debido a que ha estado ocupada con los asuntos de su nueva empresa, por lo que está tomando medicamentos. El jefe Diego adelantó que en la finca se cambien todas las bebidas por opciones sin alcohol. Ximena, con la cabeza agachada, bebió un sorbo de agua con gas, como si estuviera escuchando la historia de amor de dos extraños. Al saber la verdad, Beatriz soltó una risa sarcástica: —El jefe Diego sí que es un buen hombre, preocupándose por la señorita Carmen y haciendo que todos pag