Capítulo 1003

En la mejilla de Andrea quedaban claramente marcadas cinco huellas de dedos. Lorena se colocó delante de ella. —Señora Pilar, lo que tenga que decir, espérese hasta que termine la operación. No le va a pasar nada a Alejandro. Pilar estaba llena de preocupación, pero al ver la cara de Lorena rio. —Antes, la gente del círculo decía que eras una persona maldita, yo no lo creía. Ahora veo que, en efecto, todo aquel que se acerca a ti no termina bien. Te ruego que, de ahora en adelante, te mantengas lejos de Ale. Dicho esto, agarró al médico que estaba al lado. —¿Cómo está? —No muy bien. Incluso si la operación termina, habrá varios días de periodo crítico. En ese periodo de riesgo podía perder la vida en cualquier momento. Los hombros de Pilar se desplomaron de golpe y miró a Lorena y Andrea. —¡Si a Ale le pasa algo, no se los perdonaré! ¡Alejandro era el alma de la familia Gutiérrez! El pasillo quedó sumido en una tensión helada, nadie pronunció una palabra. Dos horas después, la operació