Capítulo 723
Mientras recogía las cosas del suelo, Lorena habló: —Puedes tratarlo bien y aun así no será feliz, en cambio, conmigo, aunque lo trate mal, él sí lo será. El amor es cosa de dos personas que están dispuestas. Yo pensaba que eso ya lo habías entendido.
Las lágrimas comenzaron a correr por el rostro de Ana.
Claudia sintió cierta compasión. Ana tenía un futuro brillante por delante, pero por aquellas palabras que ella misma había pronunciado en el pasado, se había vuelto así de obstinada.
—Ana, escúchame, acepta esas acciones. Podrías irte al extranjero, podrías ir a donde quisieras, y el resto de tu vida sería plena.
Pero antes de que pudiera terminar la frase, afuera comenzó a arder un fuego repentino, acompañado de un fuerte olor a gasolina y resina de pino.
Lorena se levantó con la intención de abrir la puerta, pero esta había sido asegurada desde afuera.
Miró a Ana con incredulidad. —¿Quieres que muramos todas?
El rostro de Ana palideció. Se acercó a la puerta e intentó abrirla, pero

Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil