Capítulo 90

Al ver los rostros desconocidos, Adelaida y Leocadio mostraron una ligera expresión de desconfianza y curiosidad. Justo en ese momento apareció el mayordomo. —Señorita Adelaida, teniente coronel Leocadio,—saludó educadamente el mayordomo, y luego comenzó a presentar a los desconocidos machos frente a ellos. —Este es el señor Adelfo, un ayudante contratado por Alimentaria. Tiene una edad similar a la mía. Señorita Adelaida, a partir de ahora puede llamarlo tío Gabriel. —Ah, tío Gabriel, ¿has venido a plantar verduras y frutas, cierto? Leocadio sonrió, recordando que antes había hablado con Adelfo sobre contratar personal de Alimentaria para encargarse de sembrar verduras y frutas en el jardín trasero. —Sí. Respondió Gabriel, frotándose las manos llenas de tierra.—Justo ahora es la temporada de primavera, por lo que muchas verduras ya se pueden plantar. Algunas verduras fuera de temporada también se pueden sembrar un poco. Adelaida sonrió también, ya que Leocadio le había mencionado algo