Capítulo 780

Diana seguía lastimándolo. Esta vez, ¡Julian no quiso explicarle las cosas! Fue por los niños que incluso le dio la oportunidad de hablar con ellos por llamada. No quería que los dos queridos niños lo odiaran. Sean miró el celular apagado y sus ojos se abrieron de golpe. Miró ferozmente a Julian como un pequeño tigre enfadado. Betty, por su parte, gritó en voz alta. "¡Eres tan deshonesto!". La honestidad era una cualidad muy importante. Mami les contó la historia del gato y el ratón, el gato siempre era poco confiable, lo que enojaba tanto al ratón que al final se convirtieron en enemigos. Ahora mismo, Julian era su enemigo. Las lágrimas de rabia de Betty seguían colgando de sus pestañas, a punto de caer en cuanto pestañeara. Al ver sus lágrimas, Julian le pasó una servilleta. "Límpialas". Betty no quiso agarrar la servilleta. En lugar de eso, giró la cara, enojada. Aun así, su gesto la detuvo de llorar. Tal vez sabía que llorar no servía de nada, y que Julian no los dejarí