Capítulo 13
Los rumores recientes se intensificaron cada vez más. El abogado Pablo cerró las cortinas para aislar el bufete de las miradas curiosas del exterior. Dentro de la oficina reinaba un silencio absoluto; solo se oía, a lo lejos, el golpeteo constante del teclado.
—De verdad que esta gente es insoportable, hasta parecen querer ponerte una cámara encima.
—Perdón. Mi vida personal está afectando al bufete.
El abogado Pablo hizo un gesto con la mano: —No importa, soy yo quien debe agradecerte que hayas querido regresar. Pero dime, ¿qué piensas hacer ahora? No puedes pasarte la vida esquivándolos.
Antonia giró la cabeza y miró hacia la ventana. Su mirada, afilada, parecía atravesar las gruesas cortinas y alcanzar a los reporteros que esperaban abajo.
—¿Por qué habría de esconderme?
Al día siguiente, en el Centro Internacional de Convenciones de Miraflores, los medios llegaron en masa.
Antonia, estaba vestida con un impecable traje blanco. Ella se colocó ante el atril. Y sus ojos recorrieron, s

Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil