Capítulo 1279
Todos decían que antes no tenía el hábito de fumar, pero en esos últimos años parecía que había desarrollado la fea costumbre de fumar un cigarrillo cuando enfrentaba problemas.
Esa costumbre subconsciente le resultaba ser algo extraña.
El médico había dicho que era por el exceso de estrés, y que por eso tenía todas esas alucinaciones.
¿Esto eran solo alucinaciones?
Por alguna razón, de repente recordó el mensaje de amistad que no había aceptado antes.
El nombre de Ana parecía en ese momento cubrir su mente.
Ana...
Una voz en su cabeza le decía de forma constante que Ana debía ser su mujer, que ellos dos estaban destinados a estar juntos.
Debería haber aceptado esa solicitud de amistad.
Por un lado, su mente descontrolada; por el otro, su razón le decía que debía parar, que debía detener todo eso a tiempo.
Justo cuando volvió a tomar su celular, de repente sonó un golpe en la puerta.
—Gonzalo, soy yo.
Verónica golpeaba la puerta con un tono lloroso.
Gonzalo de

Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil