Capítulo 48
Dije con firmeza: —Vamos al hospital a buscar a Ramón. Si está dispuesto a decir la verdad, todavía hay una oportunidad de revertirlo.
Daniela me acompañó nuevamente al hospital.
En cuanto me vio, los ojos de Ramón se iluminaron primero con sorpresa, pero enseguida adoptó una expresión altiva: —¿Por fin viniste a verme? Te dije que volvieras conmigo y no me hiciste caso. Ahora que estás sufriendo, ¿ves que tenía razón?
Fruncí el ceño, arrepintiéndome de haber venido.
—¿Fuiste tú quien difundió lo que hay en internet? —Pregunté, mirándolo fijamente.
Ramón abrió los ojos con fingida indignación: —¿Cómo crees? Desde que salió, la mayoría te insulta a ti, pero también hay muchos que me insultan a mí. ¿Por qué querría arruinar mi propio nombre?
Abrí la boca para replicar, pero terminé guardando silencio.
—¿Viniste porque quieres volver conmigo? —Insistió.
Negué lentamente: —Lo que pasó ese día solo nosotros dos lo sabemos. ¿Puedes ayudarme a aclarar que ese vídeo fue maliciosamente editado?

Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil