Capítulo 41

El intenso alboroto en el centro de la sala llamó inmediatamente la atención de todos. "¿Qué está sucediendo?" "Parece que se ha vuelto loca. Es terrible..." "¿Tiene ella una enfermedad mental?" "¿No es esa Catherina? He oído que tiene mala salud". Los invitados susurraban entre ellos, sus voces eran una mezcla de sorpresa y curiosidad. Amelia y Theodore se asustaron al ver que su hija se comportaba de repente de esa manera. Amelia se acercó rápidamente a Catherina y la abrazó para evitar que se moviera de nuevo. —Catherina, ¿qué te pasa? ¿Por qué de repente te pusiste así? —La voz de Amelia sonaba desesperada y suplicante. Catherina, todavía en estado de locura, se limitó a sonreír: "Quiero bailar. Jeje, quiero bailar". Al no ver otra opción, Amelia apretó más el brazo y gritó el nombre de su hija en voz alta en su oído, tratando de sacarla de ese estado. El sonido agudo sorprendió momentáneamente a Catherina, quien dejó de bailar y comenzó a llorar, con el rostro desencajado por la a