Capítulo 78

Como si temiera que Tomás no lo viera, Sebastián incluso se hizo a un lado a propósito para que Tomás pudiera ver claramente lo que pasaba dentro de la sala. Al mismo tiempo no se olvidó de burlarse de Lucía. —De verdad que es conocer la cara pero no el corazón. Normalmente, delante de Tomás, fingías ser tan altiva, pura y por encima de todo, pero en privado juegas más que cualquiera. ¡Sí que te subestimé! —Tomás, lo siento, hace un momento le dije a Sebastián el número equivocado del reservado. Temía que se equivocaran de sala, así que vine rápido a buscaros. —Desde fuera volvió a escucharse la voz de Norma. Sí que estaba animado el ambiente. Al parecer Tomás había venido a buscar a Norma, solo que por un error había acabado encontrando la sala donde estaba Lucía. Sebastián preguntó: —¿No era 9208? Norma dijo: —No, es 8926. Entre 9208 y 8926 había bastante diferencia, ni siquiera estaban en el mismo piso. Y aun así Norma se equivocó hasta en eso. Era inevitable poner en duda la veraci