Capítulo 1683

Alicia vio aparecer a Roberto y, de forma inexplicable, se puso un poco nerviosa. Teresa intervino. —Fue la señorita Alicia quien dijo que tu abuela estaba muy enferma, que existía un medicamento especial. Por eso el hospital también investigó este fármaco y no había ningún problema. Roberto miró a Alicia. —¿Y cómo es que yo no sabía nada? —Al fin y al cabo, es tu abuela quien recibe el tratamiento, no tú. ¿Para qué decirte? Alicia sostuvo la mirada de Roberto y él, finalmente, no dijo nada. Después de comer, Teresa llevó al niño a la escuela. Tras despedirse del pequeño con un gesto de la mano, Lorena se sintió mucho más animada; miró a Roberto. —Está bien, ya sé que irás al hospital. De paso hazte un chequeo tú también. Roberto se puso de pie. —De acuerdo, ya lo sé. Alicia lo observó marcharse, luego se volvió hacia Lorena. —Tranquila, usted estará bien. —Señorita Alicia, ¿podría hacerme compañía y charlar un rato conmigo? —Claro, hoy no tengo nada que hacer. Además, el sol afuera es