Capítulo 1788
Después de que Oscar pronunció esa frase, todos quedaron atónitos.
María, incrédula, exclamó: —Oscar, ¿he hecho algo que te haya ofendido? ¿Por qué dices, justo ahora, que estoy muerta? ¡Estoy viva y muy bien!
Jorge también intervino. —Oscar, ¿te has vuelto loco? ¡Ve al psiquiátrico! Si sigues hablando así, vas a arruinar el buen ambiente de la fiesta.
Pedro añadió: —En la cena de esta noche, si vuelves a dirigirte a María de esa manera, nosotros tampoco seremos amables contigo. ¿Cómo puedes tratarla así? ¡Es nuestra única hermana!
¿La única hermana?
Cuando Oscar escuchó esas palabras, sintió una profunda repulsión.
Gritó, fuera de sí: —¡Imposible! ¡Esa perra de María no es nuestra hermana! ¡Nuestra única hermana es Alicia!
Al oír esto, la expresión de María se contrajo al instante.
No comprendía por qué la actitud de Oscar había cambiado de forma tan abrupta. ¿Acaso Alicia le había dicho algo en secreto?
María, con voz quebrada, respondió: —Oscar, no sé qué te habrá dicho Alicia, pero

Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil