Capítulo 992

María estaba algo preocupada: —Álvaro no puede haberse suicidado. Alicia respondió: —Sé que Álvaro no se suicidó, esta situación debe estar relacionada con la familia Mendoza. Pero si se quiere detener a los Mendoza, no será tan fácil. Mientras Álvaro esté en la cárcel, estará en peligro. Aunque esta vez no muera, ¿y la próxima? Oscar se acercó a Alicia: —No te preocupes, mientras tenga una oportunidad de sobrevivir, me aseguraré de que se recupere. No se celebrará un juicio sin que esté presente. Alicia aún no había respondido cuando María se adelantó, tomando el brazo de Oscar y llorando desconsoladamente: —Por favor, salva a Álvaro, es mi único familiar. Aunque María siempre decía que todo lo que tenía ahora era culpa de Álvaro, en este momento, con la vida de él en peligro, no podía dejar de preocuparse. Oscar miró a María con desdén y retiró su brazo. Su tono era extremadamente indiferente: —Lo haré por la familia García, no por ti. —¡Oscar, en serio muchas gracias! Sabía que solo