Capítulo 142
La palidez de su ya de por sí blanco rostro se realzaba cada vez más, y el enrojecimiento en su frente, donde se había golpeado, resultaba ser algo impactante.
Su reflejo en el vidrio mostraba a una persona fría y clara, llena de tristeza.
Lo único en su mente eran las recientes palabras de Francisco.
—Señorita Lucía, no podemos acelerar la recuperación de Honorato; hay que actuar con calma. Durante este proceso, es muy probable que pierda el control emocional o que actúe de manera impulsiva. Los cuidadores lo estarán vigilando las veinticuatro horas del día; solo le queda esperar.
¿Esperar? La espera siempre es la parte más difícil.
Podrían surgir muchos resultados.
Solo hay un resultado bueno: que Honorato se recupere.
Pero los malos resultados son incalculables.
Finalmente, Honorato se tranquilizó y quedó profundamente dormido en la cama del hospital.
Lucía estaba sentada en una silla, con las piernas colgando en los brazos de esta, mirando hacia la ventana y la brillante ilum

Klik untuk menyalin tautan
Unduh aplikasi Webfic untuk membuka konten yang lebih menarik
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda