Capítulo 158

—Ya que echaste a Rosa, si voy a la oficina, ¿no sería una decepción para ti? Wálter la miró con una expresión burlona, sus ojos fijos en ella. Parecía ver a través de esas pequeñas estrategias suyas, en las que fingía rechazo, pero, en el fondo, lo aceptaba. Su apariencia mostraba un reflejo divertido. —¿Cuándo eché yo a Rosa? —Lucía sorprendida por esas palabras. Sus ojos grandes y expresivos reflejaban con claridad los rasgos afilados y atractivos del hombre frente a ella. Wálter, al ver que negaban la acusación, no insistió en desenmascararla. Simplemente le dijo: —Mañana no iré a la oficina, pero tengo reuniones en línea que atender. Estaré ocupado. —Entendido. Como de costumbre, él no escuchaba explicación alguna, así que Lucía tampoco se molestó en darlas. Esa noche, en Luzdeluna fue azotada por una fuerte tormenta de nieve, y el Grupo Estrella envió un aviso importante en el chat de la empresa informando que se trabajaría desde casa. Wálter se concentró en reuni