Capítulo 46

De repente me encontré en una situación muy incómoda. Si lo rechazaba, me convertiría en una persona ingrata. Pero si aceptaba su petición, temía involucrarme demasiado con él. —No te obligo, si no quieres está bien, al parecer, las buenas personas no siempre reciben recompensas. Daniel suspiró profundamente al otro lado del teléfono, y ese sonido resonó en mi cabeza como una maldición. —Iré en un momento. Acepté justo antes de que colgara el teléfono. Aunque solo fuera por unos días, no tendría que pasar nada indebido con él, y después podría alejarme. Parecía que aún no había desayunado, así que tomé un taxi rápidamente hacia un restaurante cerca del hospital y compré algunos desayunos para llevar al hospital. En ese momento, Daniel yacía elegantemente en la cama, solo tenía una fractura en la mano y realmente no entendía por qué necesitaba hospitalizarse. Cuando me vio llegar, inmediatamente comenzó a pedirme que hiciera cosas por él. —Estuve aquí observando toda la noche, no hay p