Capítulo 117

Punto de vista de Alex Subí las escaleras para salir al patio y dirigirme a mi destino: los aposentos del rey. El único problema sería llegar allí. Lo más importante era mantenerme alejado de la zona circundante al palacio, ya que estaba lleno de maleantes, lobos salvajes y guerreros bárbaros al servicio del señor de la oscuridad. Tuve que dar la vuelta para entrar por la puerta trasera. En el momento en que irrumpí en el pasillo, los guardias y las sirvientas iban y venían ocupados en sus labores, todos caminando apresuradamente para cumplir con sus respectivas tareas. La atmósfera de ese lugar sombrío no contribuyó a ponerme de buen humor. Detestaba estar ahí, pero le había prometido a la princesa que la ayudaría y no podía faltar a mi palabra. No tenía ninguna razón para ser compasivo con ella o con su reino, de todos modos, tampoco tenía algún plan para ayudarla. Pero en el momento en que mencionó el nombre de Elliot, supe que debía hacer algo. Seguí internándome en la residencia d