Capítulo 169
La forma en que Ana llamaba a Mariana cambió: al principio era señorita Mariana, luego pasó a llamarla simplemente Mariana, y finalmente terminó diciéndole Marian.
Lejos de molestarse, Mariana se sintió bastante complacida con aquel trato.
Con satisfacción, dijo: —Ana, anota mi número de teléfono. En el futuro, si hay algo que no entiendas, puedes preguntarme.
Ana asintió repetidamente; pensaba que Mariana era increíble, como si lo supiera todo.
Ambas anotaron sus números y se preparaban para despedirse, cuando Mariana, como si recordara algo de repente, se volvió hacia Ana y le dijo: —Ah, por cierto, con lo despistada que eres, ten cuidado con esa mujer hipócrita, Laura.
—Sí, Marian, no te preocupes, lo haré. ¡No le tengo miedo a Laura!
Mariana no sabía si reír o llorar. Ese no era un asunto de tener o no tener miedo.
Pensó un momento y añadió: —Mira, si la próxima vez Laura te causa problemas, llámame. Yo te respaldaré.
La cabeza de Ana seguía moviéndose con entusiasmo; realmente pen

Klik untuk menyalin tautan
Unduh aplikasi Webfic untuk membuka konten yang lebih menarik
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda