Capítulo 258 Quiere poseerte descaradamente, por supuesto, hay que hacerlo desistir
Angélica se dio vuelta y vio que era Francisco.
—Señor Francisco.
Francisco le había pedido antes que lo llamara solo Francisco, pero ella siempre lo encontraba demasiado cercano.
—¿Tienes tiempo para tomar un café? —Francisco hizo una breve pausa y luego esbozó una ligera sonrisa.
—Está bien, espera un momento.
Angélica finalizó los trámites pendientes y, tras hablar con el gerente del proyecto, salió con Francisco rumbo a una cafetería cercana a la Universidad Marítima.
—¿Escuché que te vas a casar con Martín? —Después de sentarse y pedir, Francisco preguntó.
Su mirada era sincera, como si solo pudiera creerlo si lo escuchaba directamente de ella.
Angélica asintió con una sonrisa: —Sí, y para ese entonces, Francisco, debes venir.
Ella no podía ignorar los sentimientos especiales que Francisco tenía por ella, pero no podía corresponderlos. Tampoco quería lastimar a alguien que había sido tan amable con ella, así que trataba de evitar cualquier situación incómoda.
Franc

Klik untuk menyalin tautan
Unduh aplikasi Webfic untuk membuka konten yang lebih menarik
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda