Capítulo 166

Cuando regresó a la casa familiar, Diego efectivamente no había vuelto. Ximena pensó que, en ese momento, Diego debía de estar con Carmen. Antes, no le importaba en absoluto cómo Diego acompañaba a Carmen. Pero hoy... Ximena no pudo evitar tener otros pensamientos. Doña Lorena, al ver que Ximena había regresado, naturalmente se alegró y la tomó de la mano, mostrándole afecto y preocupación. Pronto mencionó a Diego: —¿Por qué Diego no ha vuelto contigo? ¿En qué está tan ocupado Diego? Ximena bajó la mirada: —No lo sé. Doña Lorena, claramente insatisfecha, pidió a la empleada que le trajera el celular y llamó a Diego. Esta vez. Diego contestó. Parecía que, antes, había ignorado deliberadamente sus llamadas. Doña Lorena, con tono severo, dijo: —Ya son más de las ocho, y todavía no vuelves a cenar. No se supo qué respondió Diego, pero el semblante de Doña Lorena se suavizó un poco. Colgó la llamada y le dijo a Ximena: —No lo esperes más, que él vea qué hace. Aunque no pudiera regresar de i