Capítulo 95
Punto de vista del líder solitario
—Jefe, ¿está seguro de que quiere comer en esa cafetería? Podemos traerle la comida —dijo Stone.
Entonces, me detuve a mitad de camino y le hice un gesto con la cabeza para que fuera a comprarme algo. De todos modos, no me gustaban los lugares abarrotados, pero ¿qué se suponía que debía hacer mientras tanto? ¿Quedarme sentado? Claro que no.
—Vamos a dar un paseo rápido fuera —le dije a mi lobo y, junto antes de doblar la esquina, alguien chocó conmigo e hizo que me estremeciera por el impacto. «¿Qué es esto? ¿Tiene la cabeza de piedra?», pensé y, cuando estaba a punto de regañarla, la vi agachada, mirando su celular, preocupada. «Vamos, dame un respiro. ¡Los humanos de hoy en día son tan raros! ¿Cómo puede ser que esté preocupada por su celular en lugar de disculparse conmigo? ¿Dónde están sus modales?»—. Oye... —comencé a reprenderla, pero me quedé mudo cuando ella empezó a hablar.
—Lo siento, no…
Dejé de escuchar el resto de las palabras en cuanto l

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