Capítulo 11
Tres días después, la reunión de Juan finalmente terminó.
Se frotó las sienes hinchadas y encendió su teléfono que había estado apagado durante varios días.
Innumerables mensajes llegaron de golpe; Viviana había enviado más de cien mensajes, mientras que Elena solo había mandado uno.
Instintivamente, abrió la conversación de Elena.
Era una notificación de transferencia.
—Transferencia: 10,000 dólares
—Nota: Medio mes de alquiler + gastos médicos
Aparte de eso, no había ningún otro contenido.
Juan arrugó la cara y soltó una risa irónica, irritada.
Sus largos dedos teclearon sobre la pantalla.
—[¿Me falta dinero? ¿De verdad tienes que ser tan exacta conmigo respecto a nuestra relación?]
Después de enviar el mensaje, se quedó mirando la pantalla durante diez minutos.
Antes, cada vez que le escribía a Elena, ella siempre respondía de inmediato.
Pero esta vez, la conversación permaneció inquietantemente en silencio.
Marcó directamente el número de Elena.
—Lo sentimos, el teléfono que usted

Klik untuk menyalin tautan
Unduh aplikasi Webfic untuk membuka konten yang lebih menarik
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda
Nyalakan kamera ponsel untuk memindai, atau salin tautan dan buka di browser seluler Anda