Capítulo 16

Mario miraba con expresión sombría a la mujer que yacía a sus pies. Él casi no podía reconocer que esa fuera Clara. Debido al trabajo, había estado de viaje durante varios meses y, al volver a casa, descubrió que Clara no estaba. Solo al preguntar se enteró de que había sido ese tipo, Ramón, quien se la había llevado. ¿Cómo podría Mario no conocer sus intenciones? Desde el principio, ambos habían amado a Clara por igual; solo que Ramón había dado mucho más que él, hasta el punto de estar dispuesto a sacrificar su propia felicidad para casarse con Laura, arrancar el corazón de su madre y convertirse en su protector en las sombras. Si realmente los comparaba, Mario sentía que difícilmente podría ganarle a Ramón. ¡Y aun así ese hombre había sido capaz de secuestrar a Clara para torturarla! La ira de Mario era incontenible. Al ver la apariencia lastimosa de Clara, supo que durante ese tiempo ella debía de haber sufrido muchísimo. Mario quiso llevarse a Clara, pero entonces apareció Ramón.